[:es]Es bien sabido que AWS nos permite desplegar aplicaciones en formas que habrían sido inimaginables en infraestructuras y procesos T.I. convencionales. Por la misma razón, es bastante sencillo perderle el rastro a qué exactamente ha estado funcionando todo ese tiempo, al final de un periodo de Billing podría traer costos inesperados de parte de AWS, muchos de los que indican que tus cargos se han salido de control.

Para evitar esto, necesitas entender de dónde provienen las sorpresas. En este artículo se describirán los cinco errores más comunes en control de costos y manejo de recursos que la gente y las organizaciones cometen en AWS.

1. Usar instancias sobredimensionados, demasiadas instancias, o dejar las instancias correr en segundo plano.

Escoger cuidadosamente el tipo de instancia correcta es una decisión fundamental que hay que confrontar

¿Qué tamaño de instancias deberías poner en marcha?

¿Cuántas vas a necesitar?

¿Cómo le mantendrás la pista a todos tus recursos (Un buen lugar para empezar es tu página de facturación de AWS)?

Cada infraestructura desplegada tiene características únicas, así que estas preguntas sólo pueden ser respondidas por tu equipo y tú.

Los tipos de instancia que están específicamente optimizados para cómputo, memoria o almacenamiento, obviamente serán más costosos que los de bajo rendimiento o las versiones generales. Es tu responsabilidad asegurar no sobre aprovisionar un proyecto específico.
Y recuerda: utilizar instancias sobredimensionadas te costarán dinero, utilizar demasiadas instancias te costarán dinero y dejar que corran instancias que no utilices, ¿Adivinaste? te costará dinero.

2. Escoger el modelo de instancias incorrecto.

Además de los tipos de instancias, también hay tres maneras distintas de comprar recursos de instancia y, por lo tanto, controlar de cerca los costos de AWS:

Las instancias bajo demanda te permiten pagar cuotas fijas por hora sin compromisos.
Instancias reservadas proporcionan capacidad de reserva, ofrecen descuentos significativos sobre precios bajo demanda por hora al momento de realizar compras de instancias por un plazo mayor.

Las instancias de subasta te permiten ofertar un precio por, por ejemplo, la capacidad. Bajo la suposición de que tus aplicaciones tienen un inicio y final flexibles y pueden sobrevivir a interrupciones de servicio cuando las instancias al precio de oferta no estén disponibles o combinar instancias bajo demanda con recursos mínimos con instancias en subasta cuando el costo y la disponibilidad lo permitan. Esto podría generar un ahorro considerable.

Para un usuario primerizo, las instancias bajo demanda son las más sencillas de desplegar y la parte de “Sin compromiso”, suena bastante atractiva. Pero utilizar instancias bajo demanda por periodos de tiempo sostenidos, podría causar costos inesperados al final del mes; detener e iniciar constantemente estas instancias también podría ser costoso. Si necesitas desplegar un sitio que requiere operar 24/7 y esperas que se mantenga por los siguientes doce meses, estarías mucho mejor con una instancia reservada, dado que conoces el costo exacto de lo que tienes enfrente.

Si planeas desplegar una infraestructura que es un poco más compleja y que requiere balanceados de carga elásticos y auto escalamiento, probablemente necesites trazar una combinación de instancias bajo demanda y de subasta, con un cálculo cuidadoso en relación a los costos de AWS. Realizar esto de forma correcta, requiere de una planificación cuidadosa.

3. Tener demasiados respaldos o imágenes de disco.

Puedes respaldar tus datos de volúmenes Amazon EBS en Amazon S3 por medio de Snapshots a lo largo del tiempo. Respaldar tus datos es una acción inteligente, hacerlo constantemente es crucial. De cualquier forma, los snapshots EBS deberían ser almacenados con moderación o podrías encontrarte en un problema de que los costos de almacenamiento se multipliquen exponencialmente. Asegúrate de tener una estrategia de retención de Snapshots (utilizando las reglas de calcio de vida de Amazon S3) que ajuste a tus necesidades específicas.

4. No liberar IPs elásticas almacenadas

AWS permite, sin costo, asociar una dirección IP elástica con una instancia corriendo. De cualquier forma, se te cobrará por cada IP elástica adicional que asocies con cada instancia, por hora en prorrateo. Para asegurar el uso eficiente de direcciones IP elásticas (que son, por definición, un recurso limitado), AWS impone un pequeño cargo adicional por hora cuando estas IPs no se asocian a alguna instancia funcionando o cuando están asociadas a instancias detenidas, etc. Podrías asumir que una vez que detienes tu instancia la IP se libera, pero no es así y los números en tu factura lo prueban. Así que asegúrate de que no mantienes y pagas por IPs que no utilizas.

5. No monitorear los costos de tus proveedores de nube

Nubity cuenta con un monitor de costos en la nube, en él podrás encontrar el total de los costos del mes o fijar un periodo de tiempo para revisar, filtrar por servicio y tener una vista ampliada de los gastos que cada servicio en la nube consume.

Además de todo lo anterior podrás mirar los costos por máximos, mínimos, suma o promedio; revisar por regiones y filtrar por servicio.

Ya puedes analizar los costos tanto de AWS y Azure desde el mismo panel, pero más tarde podrás visualizar también el consumo de IBM Cloud.

Ir a My.Nubity

Controla los costos en AWS: Un plan en el horizonte.

Al considerar los puntos anteriormente mencionados, seguramente podrán ayudarte a mantener bajos los costos en AWS. Como se mencionó antes, AWS es una plataforma increíble para desplegar aplicaciones grandes a precios inimaginables, sin embargo, si las aplicaciones no se monitorean cuidadosamente y se les mantiene la pista, podrías encontrar que el dinero que esperabas ahorrar al desplegar tu infraestructura en AWS, se va volando silenciosamente por la ventana.

Con información de: cloudacademy[:en]Es bien sabido que AWS nos permite desplegar aplicaciones en formas que habrían sido inimaginables en infraestructuras y procesos T.I. convencionales. Por la misma razón, es bastante sencillo perderle el rastro a qué exactamente ha estado funcionando todo ese tiempo, al final de un periodo de Billing podría traer costos inesperados de parte de AWS, muchos de los que indican que tus cargos se han salido de control.

Para evitar esto, necesitas entender de dónde provienen las sorpresas. En este artículo se describirán los cinco errores más comunes en control de costos y manejo de recursos que la gente y las organizaciones cometen en AWS.

1. Usar instancias sobredimensionados, demasiadas instancias, o dejar las instancias correr en segundo plano.

Escoger cuidadosamente el tipo de instancia correcta es una decisión fundamental que hay que confrontar

¿Qué tamaño de instancias deberías poner en marcha?

¿Cuántas vas a necesitar?

¿Cómo le mantendrás la pista a todos tus recursos (Un buen lugar para empezar es tu página de facturación de AWS)?

Cada infraestructura desplegada tiene características únicas, así que estas preguntas sólo pueden ser respondidas por tu equipo y tú.

Los tipos de instancia que están específicamente optimizados para cómputo, memoria o almacenamiento, obviamente serán más costosos que los de bajo rendimiento o las versiones generales. Es tu responsabilidad asegurar no sobre aprovisionar un proyecto específico.
Y recuerda: utilizar instancias sobre – dimensionadas te costarán dinero, utilizar demasiadas instancias te costarán dinero y dejar que corran instancias que no utilices, ¿Adivinaste? te costará dinero.

2. Escoger el modelo de instancias incorrecto.

Además de los tipos de instancias, también hay tres maneras distintas de comprar recursos de instancia y, por lo tanto, controlar de cerca los costos de AWS:

Las instancias bajo demanda te permiten pagar cuotas fijas por hora sin compromisos.
Instancias reservadas proporcionan capacidad de reserva, ofrecen descuentos significativos sobre precios bajo demanda por hora al momento de realizar compras de instancias por un plazo mayor.

Las instancias de subasta te permiten ofertar un precio por, por ejemplo, la capacidad. Bajo la suposición de que tus aplicaciones tienen un inicio y final flexibles y pueden sobrevivir a interrupciones de servicio cuando las instancias al precio de oferta no estén disponibles o combinar instancias bajo demanda con recursos mínimos con instancias en subasta cuando el costo y la disponibilidad lo permitan. Esto podría generar un ahorro considerable.

Para un usuario primerizo, las instancias bajo demanda son las más sencillas de desplegar y la parte de “Sin compromiso”, suena bastante atractiva. Pero utilizar instancias bajo demanda por periodos de tiempo sostenidos, podría causar costos inesperados al final del mes; detener e iniciar constantemente estas instancias también podría ser costoso. Si necesitas desplegar un sitio que requiere operar 24/7 y esperas que se mantenga por los siguientes doce meses, estarías mucho mejor con una instancia reservada, dado que conoces el costo exacto de lo que tienes enfrente.

Si planeas desplegar una infraestructura que es un poco más compleja y que requiere balanceados de carga elásticos y auto escalamiento, probablemente necesites trazar una combinación de instancias bajo demanda y de subasta, con un cálculo cuidadoso en relación a los costos de AWS. Realizar esto de forma correcta, requiere de una planificación cuidadosa.

3. Tener demasiados respaldos o imágenes de disco.

Puedes respaldar tus datos de volúmenes Amazon EBS en Amazon S3 por medio de Snapshots a lo largo del tiempo. Respaldar tus datos es una acción inteligente, hacerlo constantemente es crucial. De cualquier forma, los snapshots EBS deberían ser almacenados con moderación o podrías encontrarte en un problema de que los costos de almacenamiento se multipliquen exponencialmente. Asegúrate de tener una estrategia de retención de Snapshots (utilizando las reglas de calcio de vida de Amazon S3) que ajuste a tus necesidades específicas.

4. No liberar IPs elásticas almacenadas

AWS permite, sin costo, asociar una dirección IP elástica con una instancia corriendo. De cualquier forma, se te cobrará por cada IP elástica adicional que asocies con cada instancia, por hora en prorrateo. Para asegurar el uso eficiente de direcciones IP elásticas (que son, por definición, un recurso limitado), AWS impone un pequeño cargo adicional por hora cuando estas IPs no se asocian a alguna instancia funcionando o cuando están asociadas a instancias detenidas, etc. Podrías asumir que una vez que detienes tu instancia la IP se libera, pero no es así y los números en tu factura lo prueban. Así que asegúrate de que no mantienes y pagas por IPs que no utilizas.

5. No monitorear los costos de AWS

Nubity cuenta con un monitor de costos en la nube, en él podrás encontrar el total de los costos del mes o fijar un periodo de tiempo para revisar, filtrar por servicio y tener una vista ampliada de los gastos que cada servicio en la nube consume.

Además de todo lo anterior podrás mirar los costos por máximos, mínimos, suma o promedio; revisar por regiones y filtrar por servicio.

En esta primera etapa, podrás ver el consumo en AWS, pero más tarde podrás visualizar también el consumo de Azure e IBM Cloud.

Ir a My.Nubity

Controla los costos en AWS: Un plan en el horizonte.

Al considerar los puntos anteriormente mencionados, seguramente podrán ayudarte a mantener bajos los costos en AWS. Como se mencionó antes, AWS es una plataforma increíble para desplegar aplicaciones grandes a precios inimaginables, sin embargo, si las aplicaciones no se monitorean cuidadosamente y se les mantiene la pista, podrías encontrar que el dinero que esperabas ahorrar al desplegar tu infraestructura en AWS, se va volando silenciosamente por la ventana.

Con información de: cloudacademy[:]